21 noviembre 2008

VIAJANDO EN UN COMETA (Lentejas otoñales con castañas)




Es raro, hoy continúo con el mismo ánimo de ayer. Sigo subida a mi cometa.
Ha sido levantarme mirando el amanecer, recorrer la casa, abrir el blog para contestar antes de ponerme con el trabajo, pinchar el video de los dibujos y ¡volver a estar igual! ¿No pasó nada esta noche o mientras dormía?
Debe ser que no, porque la misma alegría tierna y pacífica me ocupa.
¿Por arte del que dibuja, me habré convertido nuevamente en personaje y esta mañana vuelvo a ser la misma Dumbo femenina volando en un cometa?

"mi luz, mi corazón, mi pajarita mi creyón, por verte fui dejando..... " suena el coro.

Voy a la cocina y me hago un chupito muy caliente de leche, los pies no acaban de entrar en calor y se hace duro el tiempo hasta el desayuno.

Sigue " mi luz, mi corazón, mi tinta china por amor, le pido al dibujante..."

Ah, no, esta mañana no discuto. Pero sigo sin saber si eras sólo una ilusión de algún brujo. "por verte fui dejando..." laralala (Esta vez hago los coros yo)

"Me quedé como una línea en el espacio, me barriste sin querer con una escoba, me salvaste con un beso y un abrazo uhmmmmmmmmm..."
"me persigues por el canto de una viola, yo me escondo en el tantán de los timbales ... mi pajarita, mi creyón..." Cantaba en su versión de esta canción.

Fuera parece haber llovido mientras aquí dentro la noche pasó en una calma total. En la puerta mi gato toca para entrar y yo decido subir lo que probé ayer, aunque advierto que no me pienso bajar de mi comeeeeeeeeeeeta.


LENTEJAS OTOÑALES O CON CASTAÑAS

INGREDIENTES:
Cebolla entera con tres o cuatro clavos de olor pinchado
1 zanahoria
1 boniato
1 papa (por si alguien se la quiere comer nada más abrir el perol con un trocito de queso tierno)
1/3 de paquete de lentejas remojadas (estas brotaron casi inmediatamente)
2 churretes de tomate concentrado (tipo tubo pasta de dientes, que lo tengo en la nevera y algún uso he de darle)
Aceite de oliva
Vino de tea (es típico del norte de la isla, con aroma a esa madera, valdrá cualquier vino tinto aromático o no, como se prefiera, pero que sea rico)
Comino molido
Sal

PARA GUISAR LAS CASTAÑAS CON ANÍS (¡¡ojo, Juan!!)
Castañas
Sal
Anís en grano

Lo primero es guisar las castañas. Por supuesto no es que se necesite preparar sólo las que se usarán, una decena o docena diría yo, mejor hacer de sobra para picar, para merendar, para guarnición, para postre o únicamente para disfrutar simplemente de los sabores del otoño. Con el anís estaremos un poco protegidos pero igualmente ojo a su poder aerogenerador.
Yo después de lavar las que vaya a preparar, les hago un corte alargado en la parte de arriba de la castaña, las coloco en un caldero con agua que las cubra como si fuera a guisar papas, le añado sal de la misma manera que si lo fueran, y un abundante espolvoreo de anís en grano. Al rato la casa se llenará de un olor fantástico. Cuando están guisadas, se les escurre el agua y listo para ir comiendo a medida que apetezca, calientes o frías, duran bien uno o dos días -más no sé pq no las dejo yo-.

He puesto "lo primero es..." pero en realidad da igual el orden. La cosa es que esas castañas después de bien peladas, y mejor hacerlo en tibio para que salga fácilmente la pielecita que las recubre, las añadiré a las lentejas hechas de la siguiente manera:

Rehogo en un poco de oliva la cebolla con los clavos pinchados, cuando está levemente dorada, añado el resto de ingredientes, el boniato pelado y entero, por supuesto según tamaños, yo usé uno de esos como raíz, alargados y no muy gordos pero muy dulce, la zanahoria, la papa, las lentejas, el churrete de tomate... dejo rehogar dando vueltas con la cuchara de madera, mientras busco el vino y el comino. Sal-especio. Un par de vueltas de cuchara más. Añado el chorretón de vino y a fuego fuerte dejo evaporar el alcohol.
Cubro de agua y a cocinar.
A mí me gustan caldositas, así que a veces, y dependiendo del tipo de lenteja, lo dejo cocinar bien, y otras como esta ocasión, aparto un par de cucharones y los paso por la minipimer para que engorden el caldo. En este momento pongo también las castañas y dejo hacer unos minutos más para que se integren los sabores.
En los platos un trocito de cada cosa. Menos la papa, que ya había caído recién hecha para aperitivo.


El resultado es genial. Un plato único super sabroso, aromático, levísimamente dulzón y plenamente otoñal.
Si seré tonta que no sé qué pesa más, si el gusto del plato -que aseguro es delicioso- o la magia de cocinar productos de estación, ver el plato humear y cucharada a cucharada, apurar la vida y hablar, hablar, reír, mirar, cantar "Yo podría ser bugs bony por mis dientes..."

PDT, mil perdones por la forma de redactar las recetas. Por supuesto no están copiadas previamente ni corregidas, ni me he parado nunca a ver como podría hacerlas más claras. Las cuento como para mí, y así van. Perdón, perdón. Pero supongo que todos sabemos cocinar, intrepretar e improvisar, ¿verdad? Cualquier duda o curiosidad, preguntar.

9 comentarios:

Toñi Sempere dijo...

¿ Será posible que vas a conseguir que pruebe las castañas de nuevo ?
Las castañas guisadas , te hablo, crudas y asadas sin más me encantan pero ... probé el marrónglacé un día y ...no pude .
Desde aquella que me resisto, pero por lo que te quiero ya, lo voy a probar.
Me faltaba juan que puso el otro día para comer en su casa salchichas con castañas, que le pregunté pero debía estar ocupado que no me dijo ni mu...

Lo dicho , voy a probar, en vuestras conciencias queda como no me guste ,


un beso

Juan Hernández dijo...

Adormidera. Una cosa es que te pregunte como haces las castañas guisadas y otra que dediques una receta y además tiene que estar fabulosa. Te lo agradezco infinito. Aparte de que cada receta tuya, lleva parejo, un caudal de sentimientos encontrados, hace que al leerla, quede uno impregnado de aires con olores a recuerdos, a nostalgia y a buenas amistades.
Esta receta seguro que la voy a hacer, pero como no, abusando de tu amabilidad, te pregunto jj ¿cuanto tiempo las tienes cociendo? me refiero a las castañas no a las lentejas.
Como Picapusa me cita y como no me enteré de lo que preguntaba, no quiero quedar en mal lugar y le contestaré a ella.
Adormidera, que lo pases muy bien este fin de semana.
Saludos afectuosos

Anónimo dijo...

Halá qué pinta!! Otoño total!!
Pues yo hasta ahora sólo como las castañas asadas (aqui se cuencen con anises y no me gustan así, y crudas me resultan un poco fuertes), pero ya viendo estas y ahora leyendo que también con salchichas, entre unos y otros me voy a acabar animando y todo.

Adormidera dijo...

jajajajjaja, al final los veo a todos probando.
En mi entorno es tan normal que en noviembre todos comamos castañas, que no he conocido nunca a nadie que no le gustaran. Y con mis hermanos todos coincidimos en la preferencia por las guisadas, aunque en casa, durante esta temporada, mi padre las tostaba día sí y día también.
Las tardes se iba al fogón de atrás, y o bien las pelaba él mientras escuchaba las noticias en la radio y luego nos las traía envueltas en un pañito caliente, o bien las traía recién asadas para que entre todos hiciéramos la labor.
Pero con todo, siempre preferíamos las guisadas de mi madre.

Lo de ponerlas en los guisos es a tener en cuenta, la verdad. En ciertas salsas queda espectacular, con el pescado salado que puse el otro día o con conejo. Ese puntito dulzón aunque las sales, aboniatado seco diría yo, le va estupendamente a esos sabores, y como dice María es plenamente estacional. ¡Luego se pasa el momento, un mes y ya se terminó!
Hoy bajo a SC, no pensaba repetir pero... qué moños, hasta yo voy a traer un puñadito más del mercado.

Juan, preguntarme a mí por el tiempo, es como preguntarme de una vez para otra qué le he puesto o la cantidad, para mí todo es toque, puñito, pizca, poquito, suspiro, un FISCO.
De todas formas, como no te vas a ir de paseo, vas mirando, si? Yo calculo que como para guisar unas papas. Es más, en esta zona de Canarias, en el campo que es donde viví siempre, las castañas para un día normal, y una familia de seis como éramos en casa, se guisaban a la vez. En el mismo caldero.
Así que calculo una media hora. Tú mira a partir de los 15-20 minutos que yo cocino en butano y puede variar. La castaña va a regañarse por ese corte que tú le has dado y tenderá a crecer. Puedes sacar alguna para ir probando, o pincharla por esa zona con un cuchillo fino. El punto es rozando el dente, un poquitín apenas más pasado. O sea, que no entre libremente el cuchillo o estará muy empapada en agua. Que cueste levemente. Pero ya te digo, sacas una y la pruebas.

En cuanto al marrón glace, es mi perdiciónnnnnnnnnn. Ay, por dios, que acabo de recordar los helados italianos de Granada, que yo quiero volver!!!

Definitivamente la que va a conseguir no bajar un par de kilos antes de navidad seré yo como siga babeando de esta manera, y sucumbiendo a la tentación.

Besos a los tres mosqueteros de este blog.

cibercuoca dijo...

Las lentejas me encantan , nunca las he probado con castañas deben ser ricas pues las castañas lo son.
Gracias por tu comentario en mi blog. Besos

Mietta dijo...

que interesante - con castañas!

Adormidera dijo...

CIBERCUOCA, gracias a ti por devolver la visita.
Pena que no tengo café ni mate. Otra vez será.
Saluditos.


MIETTA, interesante, completo, sabroso, entrañable... rico.
Gracias por ese ratito que me regalas.
Un saludo

Remealsurdelsur dijo...

Que buena idea me has dado, a mi hija las lentejas como que no le van mucho, pero las castañas son su perdición, así que seguro no me va a poner mala cara cuando le ponga este exquisito plato.

Felicidades,precioso blog y precioso todo lo que cuentas.

Besitos

Adormidera dijo...

Gracias, REME.
Espero que le gusten a tu hija. A mí las lentejas es que me gustan hasta simplemente cocinadas con mucha cebolla y chorrito de aceite en crudo.
Un beso y gracias por tu tiempo.